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22 de enero de 2021

Décimo aniversario de la colaboración con MUJI: Elaborando productos regionales para contribuir a la autosuficiencia de las mujeres en Kirguistán


Kirguistán, situado en Asia Central, es uno de los países independizados tras el colapso de la Unión Soviética. Desde su independencia, Kirguistán ha sufrido una serie de convulsiones políticas y estancamiento económico por la falta de recursos energéticos e insuficiente actividad industrial para impulsar el crecimiento económico. JICA viene promoviendo proyectos en Kirguistán para revitalizar la economía con especialidades locales, implementando la iniciativa japonesa de "Un pueblo, un producto" (OVOP - One Village One Product). El año pasado se cumplió el décimo aniversario de estas iniciativas en cooperación con MUJI, que les ha permitido alcanzar la autosuficiencia a mujeres que llevan adelante organizaciones productoras de especialidades locales. MUJI es una marca japonesa de productos de primera necesidad que opera a nivel mundial.

PhotoEl proyecto "Un pueblo, un producto" en Kirguistán revitalizó la economía local y ayudó a las mujeres a ser autosuficientes


Ganando confianza a través de la producción especialidades locales

"En las zonas rurales de Kirguistán, el estatus de la mujer en el hogar suele ser subestimado. Por ejemplo, no les resulta fácil viajar libremente fuera de sus pueblos debido a sus obligaciones domésticas. Sin embargo, gracias a estos proyectos, pueden elaborar productos locales, obtener ingresos y mantener a sus familias, lo que ha elevado su estatus en el hogar y les ha permitido ser independientes y ganar confianza en sí mismas."

El experto de JICA HARAGUCHI Akihisa, a cargo del proyecto OVOP en el distrito de Issyk-Kul (Kirguistán) desde 2009, analiza la última década en retrospectiva. OVOP es una iniciativa de revitalización regional que comenzó en la Prefectura de Oita (Japón). Como su nombre lo indica, el concepto es que "cada pueblo elabore productos especiales nacionales de calidad mundial". La provincia de Issyk-Kul está situada a lo largo de la Ruta de la Seda, que conecta Japón y Medio Oriente, y ha sido tradicionalmente un centro de producción de lana y un tesoro de frutas y frutos rojos. En este proyecto, las especialidades locales, como las artesanías de fieltro y las mermeladas, se están convirtiendo en productos de alta calidad y alto valor agregado.

PhotoMujeres aprendiendo a confeccionar artesanías en fieltro

En cada pueblo, se crea un "taller comunitario" en edificios escolares o municipales abandonados. Cualquier mujer puede participar, aprender las técnicas artesanales y asumir la responsabilidad de su producción. Los beneficios de los artículos producidos en el taller se devuelven a las productoras, y así las mujeres del pueblo pueden ganar dinero por sus propios medios.


Creando un sistema que permite generar ganancias continuas

La característica más importante del proyecto OVOP es que todos pueden participar y que genera ingresos seguros en forma continua. Para que esto sea efectivamente posible, el proyecto da soporte también al lanzamiento de OVOP+1, que contempla aspectos logísticos como desarrollo de productos, adquisición de materias primas, ventas y exportación. El proyecto apunta a seguir reforzando la capacidad de OVOP+1 para conectar a los productores con los mercados.

En Issyk-Kul hay unos 2.700 productores inscriptos en OVOP+1, y aproximadamente el 90% son mujeres locales. Las actividades de OVOP+1 se están extendiendo por todo Kirguistán, y al establecerse un "sistema para vivir y generar ingresos dentro de los pueblos", esperamos mejorar la situación de las mujeres en todo Kirguistán y detener el éxodo de los jóvenes en busca de trabajo.

PhotoOVOP+1 se encarga de todo, desde la compra de materias primas (izquierda), la gestión de calidad del producto (centro), el diseño y la planificación (derecha), hasta el cierre de la transacción


Así habla Sr. Haraguchi del futuro de OVOP+1 en Kirguistán:
"El personal de OVOP+1 trabaja junto con los productores para satisfacer la demanda de productos de alta calidad. Repitiendo experiencias exitosas, a medida que van aprendiendo a manejar la presión de la entrega de productos, desarrollan gradualmente una mentalidad empresarial. Este ciclo debería permitir que el sistema continúe aún después de que finalice el proyecto de JICA".

El aumento en los pedidos de productos MUJI asiste a los pueblos empobrecidos por la COVID-19

Los artículos elaborados bajo este proyecto también pueden adquirirse en Japón a través de Ryohin Keikaku Co. Ltd., empresa administradora de MUJI. El "Proyecto MUJI x JICA" comenzó en 2010 en colaboración con JICA para desarrollar productos en países emergentes.

Todos los años se venden en los locales de MUJI entre 10 y 20 tipos de artículos de fieltro de Kirguistán, cuya calidad y diseño están a la altura de otros productos. Con el creciente interés por el consumo ético, en un entorno en que la gente compra productos teniendo en cuenta cómo se producen y cómo vuelven los beneficios a la comunidad local, los pedidos procedentes de MUJI en los últimos diez años representan aproximadamente el 40% de las ventas totales de OVOP+1.

PhotoMuñecos de fieltro, especialidad típica de Issyk-Kul, es el producto más vendido por MUJI. Hay muchas variantes que atraen a fieles seguidores


Debido a la pandemia de COVID-19, las zonas rurales no han podido enviar ganado y productos agrícolas a los países vecinos. Los familiares que emigraron por motivos laborales perdieron sus empleos y las remesas también se redujeron de manera drástica. Si bien los habitantes de los pueblos sufren privaciones económicas por la pérdida de ingresos en efectivo, el creciente número de pedidos de MUJI y las incesantes actividades de producción contribuyen al sustento de estas aldeas.

PhotoPersonal de Kirguistán visitando la sede de MUJI

Con expectativas para el futuro, el Sr. Haraguchi dice: "Hasta ahora, los productos se vendieron sólo en algunas tiendas para Navidad. Ahora estamos conversando con Ryohin Keikaku sobre la posibilidad de desarrollar productos habituales que se venden en los locales de MUJI. Creemos que sólo los productos de alta calidad genuina pueden construir una relación sostenible entre productores y consumidores. También esperamos que este proyecto de colaboración sea una referencia para que otras empresas participen en actividades de producción en países en desarrollo."


Para conmemorar el décimo aniversario del inicio del proyecto con JICA, la exposición especial "Found MUJI Kyrgyz" ("Fundemos MUJI Kirguistán") se está llevando a cabo actualmente en 17 tiendas MUJI de todo el país y en tiendas online (está previsto que se prolongue hasta el 11 de febrero de 2021).


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