Programas de Capacitación

Por: Dulcy Jacqueline Vázquez Herrero

A través del curso de capacitación en Costa Rica y Japón cuyos objetivos de aprendizaje fueron el manejo colaborativo de las áreas protegidas en función a las características de los ecosistemas al igual que el manejo y la regeneración de los mismos, puedo decir que estos objetivos fueron logrados y altamente valorados.

Pudimos conocer la belleza paisajística de los diferentes ecosistemas; desde el Sur de Japón, con sus paradisiacas islas, las playas del Parque Nacional Kerama Shoto en el Área de Conservación del Bosque Yambaru ubicada al norte de las islas en Okinawa, Miyazaki y el parque Aya-Cho y zonas boscosas, hasta el frio Norte de Obihiro en la prefectura de Hokkaido.

Durante dos semanas y estando aun en otoño, pudimos observar sus ecosistemas ya tapizados con nieve. En todas las ciudades que vistamos mediante el programa, se observó la calidad de vida de las personas que se desarrollan en armonía con la naturaleza.

En Japón quede muy impactada por sus estrategias de conservación de la biodiversidad, que son:

1. Integrar la biodiversidad en nuestra vida diaria.
2. Reconstruir la relación sana entre el hombre y la naturaleza en comunidades locales (Iniciativas Satoyama);
3. Asegurar los vínculos entre bosque, campos, ríos y el mar; y
4. Tomar acción con perspectiva local (donde estamos incluidos paraguayos para esta capacitación)

He quedado gratamente sorprendida por muchas vivencias y formas de vida de la "vida en Japón". Aún con la poca cantidad de palabras expresadas en japonés, la gente en las calles es muy amable, te ayudan y orientan de la mejor manera posible para que no te pierdas en las estaciones de trenes, te muestran los mapas y guías impresas con las que se cuenta en el lugar. Por ejemplo, una amabilidad casi "exagerada" para nuestra cultura occidental, es la que te dan en las tiendas japonesas. Para hacer una comparación jocosa: si quería un caramelo, desde que ingresaba a la tienda me daban un cordial saludo, mientras decidía qué comprar o buscar, me daban las gracias como mas de 10 veces, hasta por pagarles.

Siento un gran agradecimiento a la JICA por la oportunidad, al gran equipo que nos orientó en el proceso, por ayudarnos como país Paraguay, a JICA en Tokio y Obihiro, excelentes personas y amables; una atención impresionante a los becarios. Uno se siente demasiado bien atendido por su desempeño laboral.

La experiencia obtenida mediante el programa la transmitiré y aplicaré en mi zona de trabajo y desempeño de vida desde mi entorno. También un merecido y especial agradecimiento al líder de programa, un profesor y tutor de gran experiencia, quien puso gran empeño y dedicación para el cumplimiento de los objetivos de la capacitación, Sr. Ginzo Aoyama, muchísimas gracias por su guía y apoyo en la elaboración de los planes de acción. Sinceramente agradecida.