Ceremonia de finalización del Proyecto de Mejora del Suministro Eléctrico en la Isla de la Juventud:Contribuyendo a la estabilización del sistema eléctrico y a soluciones para el cambio climático en la isla más remota de Cuba

El 26 de abril se celebró en la central eléctrica de la Unión Eléctrica de Cuba (UNE) en la Isla de la Juventud, la mayor isla de la República de Cuba después de tierra firme, la ceremonia de finalización del Proyecto de Mejora del Suministro Eléctrico en la Isla de la Juventud, un proyecto de ayuda en forma de subvención.

A la ceremonia asistieron unas 200 autoridades gubernamentales y empresariales, entre ellas el Primer Ministro, Manuel Marrero Cruz, el Ministro de Energía y Minas, Vicente de la O Levy, el Director General de la UNE, Alfredo López Valdés, el Embajador Extraordinario y Plenipotenciario en Cuba, Hirata Kenji, y el Director de la Oficina de JICA en Cuba, Ashida Tatsuya.

Cuba se enfrenta a retos como reducir las importaciones de combustibles derivados del petróleo necesarios para la generación de energía térmica, que representa más del 80% de su electricidad, así como mejorar la eficiencia de la generación de energía y la fiabilidad del suministro, que han disminuido debido al envejecimiento de las centrales térmicas. Por ello, el país se ha fijado el objetivo de aumentar la cuota de energías renovables en la generación eléctrica nacional para 2030. La zona objetivo del proyecto, la Isla de la Juventud, es la mayor isla de Cuba después de la principal, con unos 80.000 habitantes, y se abastece de electricidad a través de una red eléctrica independiente. El Gobierno cubano pretende aumentar el porcentaje de energía renovable en la isla del 5% actual al 30%, por encima del objetivo nacional, para 2030.

Sin embargo, la energía solar y eólica depende en gran medida de las condiciones meteorológicas, y las fluctuaciones pueden alterar el equilibrio entre la oferta y la demanda de electricidad, provocando inestabilidad en la frecuencia de la red, averías en los equipos, cortes de electricidad y otros problemas. Alcanzar un 30% de energías renovables requiere un sistema de estabilización de la red eléctrica que garantice un suministro constante.

Dadas estas circunstancias, el proyecto se ejecutó con el objetivo de mantener un suministro estable de electricidad y luchar contra el cambio climático en la Isla de la Juventud mediante la instalación de los equipos y dispositivos necesarios, como baterías de almacenamiento, instalaciones de recepción y transformación de energía y equipos de control. Se espera que estos esfuerzos aumenten la cuota de energía renovable en la generación total de electricidad de la isla del 5% al 18%, contribuyendo así a la estabilización del suministro eléctrico de Cuba.

En la ceremonia de finalización, el Primer Ministro Marrero declaró: "La ejecución de este proyecto es de gran importancia, dada la compleja situación económica que está tensando la oferta y la demanda de electricidad en todo nuestro país. Quiero agradecer al Gobierno japonés y a la JICA su apoyo financiero y técnico."

El embajador Hirata señaló: "Cuba no está sola. Tiene muchos amigos en todo el mundo, incluido Japón. En los últimos años, la cooperación bilateral entre Japón y Cuba se ha ampliado y diversificado. Nuestro país está siempre dispuesto a apoyar el desarrollo del pueblo cubano."

JICA seguirá promoviendo la cooperación en el sector energético de Cuba, incluida la introducción de energías renovables.