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La banana paraguaya alcanzó en el año 2021 un volumen de producción de 97.470 toneladas, según la Dirección de Censo y Estadística Agropecuaria (DCEA) del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), además de posicionarse como un importante rubro de exportación, siendo el 60% de la producción de ese año (unas 58.453 toneladas) exportado a países como Argentina, Chile y otros. Sin embargo, dicho cultivo también se ve ocasionalmente afectado por la detección de residuos de agroquímicos en los análisis de importación, razón por la cual, al igual que el sésamo, se consideró la necesidad de fijar las Normas de Uso y Límites Máximos Residuales (LMR) para este cultivo.

El mecanismo así como la base el ensayo de residualidad en cultivos se tomó considerando los trabajos realizados conjuntamente por la Dirección de Calidad, Inocuidad y Agricultura Orgánica (DICAO) del Servicio Nacional de Calidad y Sanidad Vegetal y de Semillas (SENAVE), el Laboratorio SENAVE y el Instituto Paraguayo de Tecnología Agraria (IPTA), para fijar el primer LMR nacional para cultivo de sésamo, específicamente para el principio activo Clorpirifós. Dicha metodología de ensayo también fue referenciada para la elaboración del protocolo de ejecución del ensayo de banana.

Para este ensayo, se prepararon plantines de banana mediante siembra aséptica en el Laboratorio del IPTA Caacupé, los cuales, una vez alcanzado el tamaño requerido, se trasplantaron entre el 3 y el 19 de agosto en los 8 campos experimentales seleccionados para el ensayo, dando así inicio pleno al mismo.

Los sitios de ensayo se encuentran en los principales departamentos productores de banano, los cuales son: San Pedro, Cordillera, Guairá y Misiones, siendo cinco de ellos en campos experimentales del IPTA (Choré, San Juan Bautista, Caacupé, Natalicio Talavera y Eusebio Ayala), dos escuelas agrícolas (Escuela Agrícola de Villarrica y Escuela Agrícola de Caazapá), y una finca privada que pertenece a un productor de banana. En todos los sitios experimentales se delimitaron los sectores para los 9 compuestos objeto del ensayo (Acetamiprid, Imidacloprid, Carbaril, Cipermetrina, Ciproconazo, Thiametoxam, Propiconazol, Tebuconazol y Bifentrin) y se plantó la cantidad adecuada de plantines para el estudio de residualidad.

El IPTA realizará un adecuado control de crecimiento del cultivo, y se espera la cosecha entre los meses de febrero y marzo del 2023. Se realizarán aplicaciones de plaguicidas en las épocas adecuadas según dicta el protocolo, y luego de finalizado el periodo de carencia, se hará una recolección de muestras para luego realizar el análisis de residuos de plaguicidas en el Laboratorio SENAVE para el cual, junto con el análisis de los datos de ensayo por parte de la DICAO, permitirá fijar las normas de uso y LMR correspondientes para el cultivo.

Siembra aséptica de plantines en Laboratorio
(IPTA - Caacupé / Dpto. Cordillera)

Cultivo de plantines en laboratorio
(IPTA - Caacupé / Dpto. Cordillera)

Transporte de plantines a los sitios experimentales
(IPTA - Caacupé / Dpto. Cordillera)

Delimitación del sitio experimental
(IPTA - Natalicio Talavera / Dpto. Guairá)

Colocación de los plantines
(Campo Experimental de Escuela Agrícola / Dpto. Guairá)

Finalización del trabajo
(Campo Experimental de Escuela Agrícola / Dpto. Guairá)